Recubrimiento lamelar de zinc y aluminio


El recubrimiento zinc lamelar orgánico ofrece una protección a la corrosión óptima, una alta durabilidad a los tornillos, y reduce el riesgo de fragilización por hidrogenación.

Disponemos de nuestra propia línea de recubrimiento orgánico en la que podemos realizar diferentes acabados; los más habituales son el gris, el negro y el azul. La aplicación del zinc lamelar orgánico consiste en una combinación de láminas de zinc y aluminio en dispersión solvente. El recubrimiento orgánico se aplica por inmersión y centrifugado posterior; finalmente, se introducen en un horno a temperaturas superiores a 200ºC para su polimerización. 

Las principales ventajas del recubrimiento orgánico zinc lamelar se enumeran a continuación:

  • Excelente resistencia a la corrosión, desde 240 a 720 horas en los tests de cámara de niebla salina. Dependiendo de las dimensiones de la pieza, podemos ofrecer valores superiores.
  • No existe riesgo de fragilización por hidrogenación, al tratarse de un proceso no electrolítico.
  • Resistencia a los disolventes.
  • El recubrimiento orgánico cumple con las directivas medioambientales europeas ELV y RoHS.

Nuestro equipo de expertos está listo para ayudarle.